“Letargo litúrgico” propone un recorrido narrativo, poético y pictórico alrededor de los estados emocionales ligados al decrecimiento, la pérdida y la necesidad de descanso. Letargo como el estado propio de la hibernación, que es visto en este caso, y siguiendo el juego de palabras, como una forma de liturgia que no conduciría a la anestesia, sino a una acumulación de energía y a una sensibilidad acrecentada ante los sutiles matices de la luz.

El proyecto consta de dos partes: por un lado y a modo de eje narrativo y vertebrador del espacio, un cómic perteneciente a la serie de La Edad de la Abundancia, que habitualmente ironiza acerca de las contradicciones del mundo actual. En este se aborda con un enfoque cómico y a la vez místico las reflexiones que rodean los estados de pérdida y caída, y propone mediante el humor la estrambótica posibilidad de que todo lo que hacemos no sirva para nada.

Por otro lado, las pinturas crecen alrededor de este esqueleto como los pedazos brillantes que acompañan la trayectoria de un bólido accidentado. Son imágenes fantásticas de una noche sobrenatural, en las que a veces aparecen figuras animales derribadas por fuerzas mayores. Son lo contrario al clímax, o el cénit del descenso de la luz, o quizá un viaje a lo que siente un planeta al menguar, y en ellas se enfatizan los matices ultravioletas de la noche, con sus luces distantes suspendidas como líneas de puntos sin unir. Son refugios para la recuperación de energía, y conservan el sabor ácido de una chuchería astral, como el recuerdo distante de un orden cósmico inviolado.

*La traducción del comic al inglés i al francés ha sido posible gracias al apoyo del Institut Ramon Llull