Para su segunda participación en NADA Miami, Bombón presenta una exposición de Aldo Urbano y Joana Escoval.

Sus prácticas juegan a juntar elementos aparentemente disímiles para generar en sí mismos tensiones físicas y metafísicas. En sus obras y acciones, Escoval crea aleaciones con metales como el oro, el cobre o la plata para generar esculturas sensibles al clima, al pH de la piel, al sonido… También añade elementos animales como bigotes de gato o plumas que parecen sostenerse casi por casualidad. . Sus obras están en constante cambio. Esta hipersensibilidad y sutileza también está presente en la obra de Urbano. El artista, tanto en sus pinturas como en sus cómics, explora la reacción del ojo del espectador ante determinados estímulos visuales. Construye imágenes que vibran por la unión de colores y formas en permanente conflicto. Simultáneamente, a través de sus cómics, proyecta una mirada irónica y humorística sobre la práctica artística y el misticismo asociado a ella.

El stand será concebido como una zona erógena, llena de puntos de tensión y alivio, un espacio diseñado para evidenciar los cambios que se producen en la materia en niveles infinitesimales.

Los artistas asumen ideas tanto de la elucubración de la física cuántica como de la alquimia. Según éstos, el ojo que mira modifica radicalmente el acontecimiento observado, y la mano corrompe inevitablemente lo que toca.

Para ellos, este misticismo exagerado deriva en vergüenza. Cuando prestamos atención vemos que el mundo, al mirarse a sí mismo en cada sutil acto de observación, parece reírse también de sí mismo. En esta línea, Urbano realizará un cómic específico para esta exposición. El cómic se distribuirá como una edición pero el original se colgará en el stand para poder navegar por él.